martes, 6 de septiembre de 2011

Y hoy puedo decir que estoy harta de mí.

Aquella sensación en la que siento que todo me esta abrumando, que me aprieta y me deja sin aire, me asfixia y lo peor es que yo lo dejo hacer. Aquella sensación que me va matando en lo más hondo de mi alma, que mutila todas mis esperanzas y hace darme cuenta que lo que esta importando ahora, es lo externo más no lo interno. Aquella sensación que me llena de depresión y repugnancia a mi misma por no ser como quisiera ser, que me revuelca en la miseria de la soledad y no hay nada ni nadie que me pueda salvar... bueno solo hay una persona en todo el mundo que lo puede hacer, esa persona soy YO. Y quizá sí pueda, pero soy tan cobarde, tan débil, tan sin falta de voluntad que no me permito salvarme, no es porque no quiera, si no es que no puedo. Hoy es de esos días en los que digo: ¡No, ya no puedo seguir con la misma vida que llevo, no puedo! ¡No puedo ser la misma chica que fui y sigue siendo! Siempre fue el mismo problema, el de -autoestima-, ese maldito problema que toda la vida me ha afectado. He sabido sobrellevarlo hasta hace dos años, en el que todo se desencadeno, en el que todo se fue a la mierda, en el que todo cambio. Mi yo cambio, y no para parecer una bonita persona (aunque lo fui en un tiempo) si no para dar paso a esta -horrenda chica que soy-. Macarena, la puta gordita, la que se deja llevar por los -alimentos- y no por la razón. La que quizá pueda tener los mejores sentimientos, la que puede ser una chica excepcional, pero que no es feliz por como es. Esa soy yo y en cierta parte ahora mismo, me estoy dando vergüenza. Yo no quiero ser así, quiero ser como yo quiero ser y ya lo he dicho muchas veces. No sé si alguien ha vivido esto, puede ser que si, pero ¿en este punto? ¿En el que ves la salida al fondo del callejón pero la ves profundamente borroso? Yo sé lo que debo y tengo que hacer, pero no lo que puedo hacer. Explotare uno de estos días y gritare al mundo que yo cambiare, que ya no mas seré -la gordita- que ahora ven, que demostrare que mi vida depende de mí, aunque lo haya podido ver por los demás. Sólo quiero vivir mi vida como yo realmente quiero ser, sin ningún problema como este. Hace demasiado frio, la sangre que corre por mis venas se esta congelando y yo voy por algo que, comer...

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